Me quedé soñando que varias chicas deseaban besarme. Era como una especie de evento que yo había organizado con mucho perfil bajo. El evento era en un lugar parecido a la casa de mi abuela. Yo, extrañamente, tenía un perfil muy bajo. No introvertido, pero es como que "estaba en la mía". Si buscaban conversación conmigo la iban a encontrar, pero yo no la iniciaba.
Empiezan a acercarse grupos de chicas. Palabras van, palabras vienen, me doy cuenta que ambas me estaban tirando onda. Una más que la otra. Me terminan agarrando y besando desaforadamente de a una por vez. Nunca de solapaban.
Alguien ajeno interrumpe la escena por algún motivo abruptamente, aunque no era por un motivo muy importante. Entro a una habitación a escuchar a una banda en vivo. La musica era bailable, electrónica y lisergica. Comencé a sentirme liviano, como si flotase. Como si hubiese ingerido alguna sustancia alucinógena. No había ingerido nada. Era la primera vez que me ocurría de estar así de borracho sin beber alcohol ni haber consumido alguna otra sustancia. Ni siquiera fumaba aquí.
Allí, en aquella habitación se me acercan dos chicas más con una caja llena de objetos con los cuales nos pusimos a jugar. Proyectabamos la sombra y los reflejos de cada objeto sobre unas paredes blancas. Empezó a rodearnos más personas para ver lo que estábamos haciendo. Estas dos chicas estaban sorprendidas de lo que habíamos podido lograr con solo un puñado de objetos y una lampara común y corriente.
Las dos chicas con las que me había besado anteriormente estaban convertidas ahora como espectadoras. Notaba en su mirada el deseo.
Me aparto un momento del juego. Buscaba bajar y volver un poco a la soledad que me desconecta de la inconsciencia de lo hiperreal y me conecta con la conciencia de lo verdaderamente real.
Cuando me estaba retirando de la ronda que se había formado a nuestro alrededor, se acerca una de las chicas con las que hacíamos ese espontáneo espectáculo visual y entre adulaciones me da un beso en la boca.
Me gustó, pero me alejé. Estaba realmente cansado del vértigo.
Cuando me alejé bastante de la ronda, decidí recostarme en el pasto. Cerré los ojos.
Luego de un rato de meditación, que habrá durado mucho menos tiempo del que a mi me pareció, siento que me besan nuevamente. Abro los ojos y veo a una de las dos primeras chicas. Los besos empezaron siendo tiernos y luego se pusieron muy fuertes y calientes. Yo, desde abajo, la veía al revés. Me estaba besando con la cabeza al revés. Parece que eso la estimulaba, ya que se había puesto más fogoza.
Al cabo de un rato, paramos, charlamos un poco, no recuerdo bien sobre qué (creo que sobre el momento audiovisual que se había generado minutos atrás) y noto que había escrito mi nombre en un pedazo de cartón adornado con un corazón. Me pareció muy tierno. Pero no quería darle falsas expectativas.
Luego de un rato, las bandas terminan sus shows y la fiesta se va desmantelando. De a poco. Veo como la gente cansada comienza a retirarse.
Se me acerca la última chica a volver a besarme, esta vez con motivos de despedida, añorando un futuro posible encuentro.
La saludo y me despierto. Me quedé dormido sobre el pasto mientras escuchaba música.